Los líquenes son entidades formadas por dos organismos principales que viven en simbiosis: el el micobionte o talo, que es un hongo () y el fotobionte, que puede ser un alga verde o una cianobacteria. Por tanto, se pueden considerar organismos quiméricos similares a ecosistemas autónomos complejos, debido a la presencia de otros organismos que cohabitan en el talo (bacterias, levaduras, etc.).
El nombre taxonómico del liquen es el del hongo principal, al que se le conoce como hongo liquenizado. La liquenización ha aparecido varias veces de forma independiente en el reino Fungi, tanto en los ascomicetos como en los basidiomicetos, sin embargo más del 95% de las especies pertenecen a los ascomicetos.
Actualmente se conocen en todo el mundo cerca de 19.500 especies de hongos liquenizados. En los bosques tropicales, los líquenes son más abundantes sobre la corteza (especies cortícolas) y las hojas (especies epifílicas), y en menor medida sobre las rocas (especies saxícolas).